jueves, 7 de octubre de 2010

Igualdad de condiciones

Siento el impulso de tomar tus manos en signo de negar la desgracia de abandonar que me condena (las tazas de café a medio tomar, mis ganas de hacer que no llegan a ver la luz, tus labios con otros que ni a mí me importa), reprimo el impulso y sólo llego a rozar tus finos dedos de cemento y me sonríes, como si el contacto insulso valiera un hálito ínfimo de correspondencia. Caminas deslizándote quién sabe a dónde, desfasada del mundo. El apuro está ausente de tus ojos, no deseas llegar, comer, volar. La compatibilidad de aguas frías te resbala, prefieres el vapor y los sueños compartidos. Mi incertidumbre no deja de zumbarme alrededor, me aleja de ti como bala de cañón, oscurece el devenir con ausencias y hielo. Y tú, adivinándome, te acercas confidencial a mi oído y con tu aliento de caracol me dices: “yo también estoy muerta”.

viernes, 1 de octubre de 2010

lunes, 27 de septiembre de 2010

Grupo Eterno S.A. - Cuento


¡Hola, lector misterioso! Va mi primer publicación en este blog de un cuento de ciencia ficción. Nos ubica en un futuro no muy lejano en una sociedad totalitarista y autoritaria dónde existen los bancos temporales,
en los cuales el dinero puede cambiarse por tiempo y el tiempo por dinero. Esa es la premisa.
Espero, si se anima a leerlo, disfrute.


Grupo Eterno S.A

La ociosa espada

sueña con sus batallas.

Otro es mi sueño.

J. L. Borges


- Su saldo será acreditado a la cuenta de Instantes Acumulados para su posterior disfrute, cuando quiera y donde quiera. Gracias por elegir “Eternitas”, su banco temporal de confianza. ¡CLANK! - la voz femenina de la máquina se apagó con un ruido metálico.

El viejito que manejaba el cajero quedó libre para otorgar su primer lugar al siguiente en la fila, un hombre gordo y alto con uniforme naval. En la etiqueta de su nombre se leía: Capitán Izmo. Pero él sólo era ahora la cabeza de la serpiente formada por la seguidilla de humanos parados uno tras otro, que excedía ampliamente la caja de zapatos blanca que hacía de hall receptor del banco de tiempo de “Grupo Eterno S.A.”

Ferche analizaba el entorno minuciosamente, no quería perder detalle. Aparecía en su mente la madre postrada en un hospital, no cualquiera no, del mismo grupo que el banco.

Los pisos brillaban, las paredes tintineaban, la puerta doble de vidrio polarizado y la máquina de atención al cliente rompían con la secuencia de laca lustrada indefinidamente. En el techo asomaba una semiesfera observadora, último modelo en artículos de seguridad corporativa, ésta no se perdía de nada y, encima, se puede elegir cualquier ángulo de visión. Al lado de la puerta, el custodio, aparentemente el único personal humano de la sucursal, dormitaba sobre un banquito de cristal, con su flamante uniforme blanco-plateado con dos “N” repetidas a la altura del pecho y debajo de su nombre la firma estilizada de Grupo Eterno.


lunes, 20 de septiembre de 2010

jueves, 9 de septiembre de 2010

El adefesio y vos - Cuento

¡Hola, lector misterioso! Envío otro cuento al espacio para que levite por ahí dónde no haya gravedad. "El adefesio y vos" es un cuento en segunda persona que, como mínimo, busca ponernos en un lugar incómodo a través de la interpelación. Espero que aterrice en ¿buen? terreno.
Hasta el próximo.
El adefesio y vos

Habías comenzado a actuar raro sin darte cuenta, no fue de un día para el otro como comentarían después, sino que para vos fue tan gradual (asquerosamente gradual, si se me permite) que llegaste a ser algo que no sabías que eras y que, por extensión, no sabías que podías llegar a ser. Pero lo eras y, claro, lo sos.
Habitabas un sucuchito lindo, como te gustaba decirle, en el corazón de la capital, insertado en el mundo pero muy lejos de él, relacionante poco y nada con los demás seres cercanos, rogando a la providencia que no se te acerque nadie a no ser que sea soberanamente funcional a un asunto importante. Por esa época estabas terminando la carrera de abogacía, a los ponchazos diría Mabel, pero dándole como nunca al estudio que tanto te hizo parir en estos últimos nueve años.

lunes, 30 de agosto de 2010

Mi novia analista de sistemas

Mi novia analista de sistemas acaba de terminar conmigo. Se puso seria y me dijo:
«Tenemos que “Ctrl X”. Necesitamos un “F5” en nuestra vida… Si no “Ctrl S” un poco de dignidad, en el fututo esto nos va a “Ctrl V” mucho más. Y no es para “Ctrl Z” o “Supr” todo lo hermoso de este tiempo. No quiero “Esc”. Sólo quiero que entiendas que lo mejor para los dos en un “Shift” y que a veces es bueno el “Ctrl+Alt+Supr”.»
¿Qué puedo hacer más que pedirles "F1" y consejo?

miércoles, 25 de agosto de 2010

Cerrado por duelo - Cuento


¡Hola, lector misterioso! Lanzo un cuento que fue publicado una vez anteriormente en el primer número de la revista digital "Modesta", de Aurinko Sunshine, que podría ojearse sin necesidad de mojarse la punta de los dedos para cambiar de página, sólo hay que hacer click aquí.
O leálo aquí abajo, que más da. Como sea, espero, disfrute.

- Cerrado por duelo -


Todos, supongo, conocen el año en que nacieron. Todos excepto yo. Y lo que es aún peor: siempre supe el año en que iba a morir.

Cuando digo “siempre” quiero expresar que lo sé desde que nací, que no sé cuando fue. No tengo ni una aproximación. Algunos me dan 40 años de edad, otros 24, ciertas personas me ven lento y senil. Disparidad de percepciones, incluso desde mi punto de vista. ¿Hace 30 años que me casé, sólo 5 o soy recién casado?